La caligrafía japonesa, en japonés llamada (書道 shodō) o shūji (習字), un término de origen chino, es una de las más antiguas del mundo y su origen está en la caligrafía china de la época medieval de la dinastía Tang. En Japón se la considera todo un arte o incluso toda una disciplina, por la de años de práctica que requiere hasta alcanzar su perfección. De hecho, hay personas que se animan a aprender japonés por lo mucho que les gusta esta preciosa caligrafía que, normalmente, se escribe con pincel y tinta sobre un papel especial. Hoy vamos a conocer un poco los caracteres más básicos del japonés, algunos de sus kanjis y, luego, os vamos a mostrar ejemplos de caligrafía japonesa.
El abecedario japonés
Antes de aprender a el arte de la caligrafía japonesa conviene conocer un poco el abecedario japones y aprender a escribirlo. Más que un abecedario, es considerado como un silabario, ya que se construye con sílabas que representan un sonido y no con letras sueltas. El japonés tiene dos silabarios que, juntos, se conocen como Kana. Uno es el Hiragana, el que se aprende en el colegio y el más utilizado y el Katakana, para nombres y palabras extranjeras ylas onomatopeyas. A continuación os mostramos un silabario Hiragana que tiene la transliteración de cada uno de ellos para que podáis leerlos (la pronunciación es muy parecida a la del Español):