A veces sabemos poco sobre escritores famosos de la historia, nos llegan principalmente sus obras más conocidas, retazos de sus vidas, sus anécdotas más conocidas que, a veces tienen más de mito o de leyenda que de verdad y, con un poco de suerte, retenemos algún verso, el nombre de alguno de sus protagonistas o recordamos algún pasaje de sus novelas.

Como en este blog somos muy apasionados de la caligrafía y de la literatura, en este artículo nos vamos a fijar en un detalle muy particular de algunos de los escritores más famosos de la historia: su caligrafía. Vamos a ver algunos manuscritos y cartas que dejaron y vamos a analizar el tipo de letra que utilizaban. Avisamos ya de que no nos vamos a meter en análisis grafológicos, solo lo vamos a contemplar su letra desde un punto de vista técnico o estilístco. ¡Vamos allá!

Victor Hugo

Victor Hugo fue un importante escritor francés del siglo XIX, máximo exponente del Romanticismo. Es importante destacar el siglo y la época, ya que eso puede influir en el tipo de caligrafía que utiliza para sus manuscritos y cartas. Echémosle un vistazo a este:

Podemos apreciar, por la época, que está escrito con plumilla y con tinta, ya que hasta finales del siglo XIX no se popularizó el uso de la pluma estilográfica. También podemos observar que está escrito con plumilla de punta flexible, ya que los trazos hacia abajo ejercidos con más presión, resultan más gruesos (fijaos, especialmente, en las “p” y en las “q”. Del mismo modo, la densidad de la tinta no es la misma, es decir, no es uniforme, ya que a medida que escribes, se va agotando y, cuando vuelves a mojar el plumín en el tintero, el trazo vuelve a ser más marcado.

En cuanto al aspecto estilístico de la caligrafía de Victor Hugo, podemos ver que es una caligrafía cursiva bastante inclinada, algunos trazos están ligados y, otros, sueltos. Aunque el tipo de letra que imperaba en la época era la Coppperplate, así como la Spencerian, no vemos que se corresponda a ninguna de ellas, es más bien una letra personal, elegante, con estilo y con carácter. Las mayúsculas están escritas con preciosas florituras. Ciertamente, puede ser una letra romántica que concuerda muy bien con su estilo literario.

 

Miguel de Cervantes

Viajamos un poco atrás en el tiempo, al siglo XVI, para encontrarnos con uno de los escritores más famosos de todos los tiempos, Miguel de Cervantes. En la Biblioteca Digital Hispánica perteneciente a la Biblioteca Nacional de España podemos encontrar muchísimos manuscritos de Cervantes escaneados con alta resolución para poder analizarlos bien y disfrutar de ellos. Por ejemplo este manuscrito es una carta de Miguel de Cervantes al contador Enrique de Aray, para que se despache la comisión y fianza que tiene dadas sobre unas fincas del Reino de Granada. Está fechada en Madrid, el 20 de agosto de 1594.

Como vemos, es una carta escrita con plumilla de punta plana. Por la época, bien podría ser una pluma de un ave tallada para tal fin mojada en tinta. El estilo de esta caligrafía tiene un aire a la itálica por la forma de alguna de sus letras y por su inclinación. La itálica era la que predominaba en la época, aunque Cervantes la hace suya cambiando la dirección de algunos trazos ascendentes (como la “d” hacia la derecha, que recuerda un poco a alguna gótica) y unos bucles descendentes muy anchos y marcados, anticipándose un poco a la cancilleresca. En definitiva, es una letra con carácter, pero manteniendo cierta elegancia.

Aquí os dejamos el enlace del PDF para poder leerla mejor: Carta manuscrita Miguel de Cervantes.

Julio Cortázar

Ahora damos un salto hacia adelante, a mediados del siglo XX, para encontrarnos con Cortázar, uno de nuestros escritores favoritos, que nos dejó muchísimas cartas preciosas a sus amigos y en donde podemos apreciar una caligrafía muy especial que, entre otras muchas cosas, le hace único.

 

Aquí tenemos una carta manuscrita de Julio Cortázar a Marina Torres y Francisco J. Uriz con motivo de la creación del Club de Cronopios en Suecia, extraída de “Manual de Cronopios”, de Julio Cortázar, de Ediciones de la Torre.  Como podemos observar, la letra de Cortázar es una letra estrecha y alta, sin cursivas, con cierto aire estilizado, pero donde se encuentran trazos muy juguetones, que parecen bailar. En este caso, parece una carta escrita con un rotulador de punta redonda en varios colores. No hay duda de que la letra fluye sin complejos y personalidad, como su literatura.

Nos está quedando un artículo un poco largo, y nos quedan muchísimos autores por repasar y por mostrar su caligrafía, así que si os ha gustado, dejadnos comentarios y continuaremos ofreciendo más artículos como este. Hasta entonces, recordad: nulla die sine linea.