La respuesta a la pregunta ¿cuál es el mejor papel para caligrafía? no es nada fácil de responder. A nosotros nos ha llevado un tiempo probar distintos tipos de papel con distintos tipos de utensilios de escritura, desde plumas hasta cálamos de bambú, para llegar a una respuesta aproximada. Creemos, desde nuestra experiencia, que depende de si es para practicar caligrafía o para entregar un proyecto final o un trabajo final a un cliente, y os vamos a recomendar papeles para caligrafía atendiendo a estas necesidades a continuación.

 

EL MEJOR PAPEL PARA CALIGRAFÍA PARA PRACTICAR

En cuanto a finalidad, nos referimos a si es un papel para practicar caligrafía y hacer esbozos o si es para un trabajo final para entregar a un cliente.

Si la finalidad es practicar, nos bastará con un buen papel que tenga un gramaje de 90 gr/m2 y que sea un papel absorbente, sea cual sea el utensilio que utilicemos: pluma y tinta, rotulador, pincel y tinta… Es lo suficientemente grueso para absorber la tinta justa sin que se corra demasiado la tinta hacia los lados o se transparente a la siguiente página. Además, si utilizas plumas metálicas, no se rompe y, si tienes que borrar, no se resquebraja. Nosotros utilizamos concretamente el cuaderno o Bloc para esbozo Studio de Gvarro Canson y tiene un precio de 6,66€.

Aquí os mostramos un ejercicio de caligrafía gótica que hicimos en este bloc:

Por otro lado, debemos decir que nuestro bloc favorito para caligrafía y el que consideramos el mejor papel para practicar caligrafía es el cuaderno o bloc Rhodia punteado tamaño A4. Su precio es de 5,45€. ¿Por qué creemos que es el mejor? Principalmente, porque es de papel vitela punteado. El papel vitela es parecido al de los pergaminos, una especie de imitación, es muy compacto, tiene una superficie lisa que hace que cualquier rotulador o plumilla se deslice por ella perfectamente y, además, absorbe muy bien la tinta, sin que se corra y sin que se transparente. Así que es un buen papel con acabado suave y brillante.

Si os fijáis bien, además, viene punteado, lo cual es perfecto para practicar caligrafía y tener así una referencia marcada hasta acostumbrarse a hacerlo sin guías. Esta es una práctica que hemos hecho en este tipo de papel, sólo que el cuaderno es de tamaño A5:

 

Si la finalidad es entregar un trabajo final a un cliente, desde un tarjetón de invitación hasta el menú de una boda, os recomendamos que continuéis leyendo el siguiente apartado.

EL MEJOR PAPEL PARA CALIGRAFÍA PARA PROYECTOS

Si se trata de un papel de caligrafía para proyectos finales, para encargos o para trabajos finales para entregar a un cliente, la cosa cambia un poco y hay que elegir un papel de mayor calidad y, por supuesto, más caro. Son papeles con distintas texturas y rugosidades que dan matices especiales. Además, tienen peso y cuerpo, lo cual hace que aumente su valor final. Vamos a hablar de cuatro papeles para caligrafía que hemos utilizado para trabajos finales: papel verjurado, papel elefante, papel satinado y papel vitela. Esto no quiere decir que sean los únicos ni los mejores, simplemente, queremos hablar según nuestra experiencia y según papeles que nos han funcionado.

PAPEL VERJURADO

El papel verjurado, también llamado papel vergueteado o papel listado, papier vergé en francés, es un papel de buena calidad y es recomendable para la caligrafía. Este papel tiene como característica principal unas leves marcas transversales en su superficie que se hacen visibles, incluso a trasluz. Muchas veces lleva una marca de agua con el nombre del fabricante que se ve a trasluz y te indica cuál es el derecho y el revés del papel. Su color tiende a ser crema.

Como veis, hemos escrito sobre paper verjurado (podéis comprar un paquete de 100 hojas aquí por 9,93€) utilizando distintos pinceles y rotuladores para que observéis como queda. El primero, que es con un rotulador de pincel de Pentel y se nota cómo las líneas transversales hacen que el trazo tenga más personalidad, aunque puede que haya quien piense que esto es una imperfección. Va a gustos. Ocurre lo mismo con el Pilot Parallel Pen, este papel le da cierto matiz al trazo. Con el Brush Pen de Ecoline no se nota tanto, pero el resultado es bueno.

 

En esta imagen podemos ver mejor el matiz del que os hablamos, cómo la tinta impregna al papel y sus rayas verticales salen a la luz, creando texturas.

En este otra fotografía hecha a trasluz, podemos apreciar mejor las características de este papel, así como su marca de agua.

PAPEL DE PIEL DE ELEFANTE

El papel de piel de elefante no está hecho con la piel de este elefante, sino que es una imitación y simula muy bien un pergamino de piel. Es un papel que ofrece una gran resistencia al desgarro y al roce, así como a los doblados. Esto lo hace un papel perfecto para diplomas, cartas de menú o para cualquier trabajo de caligrafía que sea un proyecto final para presentar.

Para nosotros, fue toda una sorpresa encontrárnoslo en una papelería y nos pareció una buena superficie lisa para la que trabajar con un cálamo de bambú y que se deslizase bien, sin absorber demasiada tinta. En la imagen que veis a continuación podéis observar un papel de piel de elefante puesto a trasluz y con una frase en árabe, escrita con un cálamo, que dice: “Tú eres el cielo y yo no tengo alas”. Es un buen papel, pero un poco caro. Cada hoja cuesta 50 céntimos de Euro como mínimo, aunque puede subir su precio hasta 1,20€ cada uno o incluso más, dependiendo de la calidad. Podéis comprar un paquete de 10 en este enlace por 12,61€.

 

PAPEL SATINADO

Ahora le toca el turno a los papeles satinados, otros de nuestros favoritos para los trabajos finales, especialmente si trabajamos con herramientas de madera, como un cálamo de bambú tallado, pero también si queremos trabajar con fondos decorados con colores.

En concreto, trabajamos con el papel satinado de Digital Color Printing Coated de la marca Clairefontaine, de 200 gr, que se suele utilizar para la impresión láser a color de flyers y cartelería, pero hemos descubierto que tiene una aplicación apasionante para caligrafía.

 

Para este encargo de caligrafía árabe, en el que escribimos la palabra “El final”, utilizamos este papel satinado, un cálamo de bambú y tinta negra china Winsor & Newton.

Para este otro trabajo, hicimos un fondo con la mezcla de varios colores de tinta de acuarela de Ecoline y observamos que se seca enseguida y se esparce de maravilla, dejando un acabado suave y liso. Encima del fondo, escribimos la palabra utilizando un Pentel Touch de punta flexible de color negro. Consideramos que el papel satinado es un papel maravilloso sobre el cual trabajar para este tipo de caligrafía.

PAPEL VITELA

Volvemos al papel vitela, pero esta vez, no es para practicar, sino para presentar un trabajo. Se utiliza mucho en invitaciones de boda, menús y para regalar cualquier tipo de frase caligrafiada. Por desgracia, no podemos mostraros ningún trabajo propio hecho en papel vitela, así que os mostramos la obra de otros calígrafos y amanuenses.

 

Este es un manuscrito original del siglo XVIII sobre papel vitela y lo vemos visto en Kapandji Morhange.

Este otro es una obra caligráfica sobre papel vitela, concretamente “hand torn vellum” de Miss Modern Calligraphy.

CONCLUSIÓN: EL MEJOR PAPEL PARA CALIGRAFÍA

Para nosotros, el mejor papel para caligrafía, tanto para practicar como para presentar un trabajo o un proyecto final final, es el papel vitela. Es un buen papel absorbente que no modifica el trazo, es uno de los de mayor calidad, con una presentación más sólida y el que mejor funciona, independientemente del tipo de utensilio que utilices, ya sea pluma, pincel o rotulador, así como cualquier tipo de tinta de calidad. Lo recomendamos al 100%.

 

Esperamos que nuestros consejos a la hora de elegir el mejor papel para caligrafía os sirvan de ayuda y si tenéis alguna pregunta, sugerencia, comentario, crítica o si queréis compartir vuestra experiencia con nosotros, os esperamos con los brazos abiertos. Gracias por leernos y hasta muy pronto.