¡Hola a todos! En el anterior artículo os hablamos de los orígenes y la evolución de la caligrafía gótica. Hoy vamos a presentaros el primero de una serie de artículos en los que vamos a realizar ejercicios para aprender a hacer este tipo de caligrafía.
Empezamos, cómo no, por el principio, con una serie de ejercicios para principiantes.
Tened en cuenta, antes de nada, que para escribir caligrafía gótica es necesario tener una pluma, rotulador o lo que sea con la punta plana.

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Vamos a seguir los pasos que nos indica una maestra calígrafa, Katharine Scarfe Beckett, en su blog. Lo primero que tienes que hacer es fijar la altura que va a tener cada letra, y eso está íntimamente relacionado con lo anchas que sean las plumillas. Es lo que va a determinar que estés trabajando en las proporciones y medidas adecuadas, así que, antes de empezar, dibuja estas dos figuras:

 

Después, justo al lado, vamos a empezar con los trazos principales de este tipo de letra gótica, que se llama textualis quadrata. El primero que necesitamos aprender es el palo de la “i” y la “l“, que son los más sencillos. Primero, empezamos con un trazo muy pequeño en diagonal, que será el remate, normalmente se realiza con una inclinación de 45 grados. Después, se realiza el trazo del palo hacia abajo y se acaba con esa curvatura de abajo a arriba.  El resultado final de la letra es la que está remarcada con un cuadrado dorado.

Una vez tengamos controladas la “i” y la “l”, vamos a pasar a la “u” y a la “n“, que son, básicamente, dos “ies” unidas. Una por debajo y otra por arriba. Veamos en la siguiente imagen el orden de cada trazo para que os quede claro:

Ve practicando todos estos movimientos hasta aprenderte de memoria los pasos de  formación de cada letra de manera natural y puedas escribir más rápido y con más soltura una palabra entera.

Por último, vamos aprender a formar la letra “c” y la “e“, ya que se forman con trazos distintos, aunque siempre siguiendo la misma lógica de letra cuadrada, con puentes sobre y debajo de cada “pilar” y con remates cuadrados al inicio y puntiagudos al final.

Utilizaremos este mismo proceso para hacer otras letras góticas, pero eso lo veremos en el siguiente artículo, donde aprenderemos todas las letras del alfabeto en minúscula y en mayúscula. ¡Hasta entonces!